
La muela de Aroa, la anemia de Garazi: la Ibiza de ellas
Garazi Artola, en la meta de 3 Días Trail Ibiza. DELA FOTOGRAFÍA
Tres días en Ibiza, pero podían ser cuatro, cinco… Los que ellas quieran -sí, ellas-. En pleno periodo de medidas políticamente correctas, mensajes al limbo del ‘buenismo’ y dónde la mayoría de iniciativas carecen de trasfondo real, la carrera de Fátima Blázquez y su equipo ha logrado ser una meca de igualdad deportiva.
¿Pero es que acaso no existe? Yo mismo me lo podía autopreguntar…
Pero basta ver ejemplos como el de ‘la billetera’ Ourea Trail y su fórmula discriminatoria con las corredoras -no pueden participar en la misma distancia que los hombres-, para darse cuenta de que quizá el manual de buenas prácticas de la prueba ibicenca no esté demás.
La visibilidad de las deportistas -cartelería, información, podios y salidas exclusivas…- favorece la igualdad, pero también la participación, y eso en un deporte todavía muy masculinizado, es de agradecer.
Sin embargo, la edición de 2019 -la sexta, ¡y cómo ha progresado en solo un año!-, obtendrá el mejor distintivo de carrera paritaria, igualitaria, y todos los ‘aria’ que queráis gracias a la pasión, valentía, ambición, esfuerzo… de corredoras como Aroa Sío o Garazi Artola.
La primera se ha convertido en una experta en carreras por etapas y ganó por segundo año consecutivo la cita balear. Pero no, la alusión a la gallega no viene motivada porque se subiera de nuevo a lo más alto del podio… No. Ni siquiera que fuera la cuarta en la clasificación absoluta, solo superada por los tres mejores clasificados -no quiero pensar qué hubiese pasado si llega a conseguir meterse entre los tres primer@s ¿quizá alguna portadilla nacional?-.
Corrió con una infección en la muela, casi sin dormir y con la admiración de unos médicos que la veían salir para estar a punto de meterse entre los tres mejores clasificados -sí, los tres primeros hombres-
La corredora de Land reflejó el espíritu de este deporte y -de paso- puso en valor de lo qué es capaz -¿de verdad no sería capaz de correr con los hombres en Ourea?-.
Celine Gallardo, en la meta de 3 Días Trail Ibiza. DELA FOTOGRAFÍA
Aroa corrió con una infección en la muela y entre carrera y carrera, entre podio y podio, los médicos del servicio de Urgencias de ‘Eivissa’ fliparían de cómo la deportista salía corriendo -nunca mejor dicho- para cumplir con su cita con la igualdad y después del correspondiente pinchazo de nolotil. ¡Si hasta aceleró en la última etapa para que la atendiesen antes en el centro de salud! Un centro médico que la gallega había visitado de madrugada para intentar paliar el dolor y poder terminar su aventura ibicenca, días después de ser atiborrada de antibióticos…
Sin casi dormir… (la verdad es que no sé qué dice el telediario de un tal Bale y no sé que problema de espalda esta vez) y 41 kilómetros en tiempo récord…
¿De verdad hay que hablar de igualdad?
El caso de Aroa es digno de estas líneas, pero también el de la vasca Garazi Artola, quien terminó la carrera pese a su diagnosticada anemia en las horas previas; o el de Celine Gallardo o Julia Jacquet, capaces de inspirar a mujeres y hombres sin necesidad de hacer alegatos de igualdad, porque somos muchos los que aún tenemos -y luchamos- por equipararnos a ellas.