El segoviano Luis Alonso Marcos remonta para imponerse en la 100 km of Namib Desert
El corredor de La Granja se corona por segunda vez este invierno en una prueba desértica
Lo ha vuelto a hacer. Luis Alonso Marcos vuelve a imponerse en una carrera de 100 kilómetros en territorio africano. Si hace unas semanas vencía en los 100 kilómetros del Sahara, en esta ocasión lo ha hecho en la prueba por etapas que se celebra en un país tan exótico como Namibia. El corredor de La Granja (Segovia) es un auténtico especialista en carreras extremas de ultrafondo, una disciplina que le ha llevado a lo más alto en distintos rincones del mundo.
La llamada 100 km of Namib Desert, organizada por Zitoway, es una carrera con mucha tradición en el país y se celebra en formato de 4 etapas que en total suman 105 kilómetros. Una aventura deportiva y turística perfecta que combina unos paisajes paradisíacos como los namibianos con el lujo de alojarse en un hotel de 5 estrellas, acondicionado con piscina y un lujoso servicio de restaurante. Sobre el mapa, cuatro etapas de 15, 21, 42 y 26 kilómetros sobre las dunas más altas del mundo. Casi nada.
“Para mi el primer objetivo fue llegar, ya que pasé una odisea y de milagro pude estar en la salida de la primera etapa. Una vez en Namibia yo tenía claro que la clave iba a ser la etapa Maratón, de 42 kilómetros”, nos dice. “La primera de 15 kilómetros fue como un prólogo, pero Jason –un atleta local con el que entró en duelo desde el primer día– compitió a muerte y ya me metió en la meta más de 6 minutos”, comenta.
Así, la segunda etapa, con una distancia de media maratón que transcurría por pistas y caminos, y algún que otro río que cubrió de agua a los corredores hasta la cintura, se corrió muy deprisa. Parciales en meta inferiores a una hora y media tanto para Luis Alonso Marcos como para el namibiano Jason, quien le volvió a ganar aumentando a más de 12 minutos su ventaja global.
Tras las exhibiciones de los dos primeros días, Luis Alonso Marcos se mantuvo firme en su estrategia de esperar su momento. Y este llegó. Fue en la tercera etapa, la que disponía un trazado de 42 kilómetros y donde el terreno ya no facilitaba tanto los ritmos altos de Jason. “El caso es que este día también salió disparado, pero era imposible que mantuviese ese nivel. Le perdí de vista en el llano pero cuando llegamos a una zona de montaña con algo de desnivel empecé a recortarle. Poco a poco fue pagando la fatiga por esos ritmos tan altos y el sobreesfuerzo de los días anteriores y yo vi que aflojaba. Ahí apreté y le cogí. Era el kilómetro 20 aproximadamente”, nos narra Luis Alonso Marcos. A la meta llegó esta vez el segoviano con 23 minutos de ventaja, por lo que en la última etapa saldría con un colchón de 9 minutos.
La cuarta etapa, de 26 kilómetros, se celebró por una zona de arena dura, pero también con kilómetros por lechos secos y arena cuarteada. Y por supuesto, las grandes dunas, incluida la famosa Crazy Dune. “Jason se me fue pero nunca le perdí de vista, entonces sabía que no podía estar a 9 minutos de mí. El tipo hacía kilómetros a 3:40 y yo era incapaz de bajar de 4:00, pero aseguré siempre el resultado y utilicé con cabeza la ventaja de minutos que llevaba”, explica el corredor de La Granja.
Al llegar a la zona de las dunas, Luis Alonso se colocó a la altura de Jason y tras cruzar el llamado Valle de la Muerte, lo dejó atrás para coronarse en esta última etapa como campeón absoluto de la carrera. Una victoria desértica en la que se superaron los 40 grados de temperatura en muchas ocasiones y donde las etapas comenzaban a las 6:00 de la mañana para evitar la deshidratación de los participantes. En esas horas intempestivas Luis Alonso Marcos confió una vez más en su frontal Olight HS2 que iluminó sus pasos hasta el triunfo final. ¡Enhorabuena!